¿QUÉ DIRÍA EL AMIGO  MERO PANCHO?

Estos días ha visitado Tenerife un científico de fama mundial, Stephen Hawking, considerado uno de los físicos teóricos más brillantes desde Albert Einstein. Su trabajo sobre los orígenes del Universo y su estructura, desde el Big Bang a los agujeros negros, ha impulsado y revolucionado el campo de la Cosmología. Alcanzó un éxito mundial con su libro Una breve historia del Tiempo. Debido a una enfermedad neurodegenerativa (ALS) diagnosticada a los veintiún años, precisa una silla de ruedas y un sistema de voz automatizado para comunicarse. Su voz metalizada, su adaptación a una silla, le confieren un aura especial, entre la admiración y la incredulidad, que le acompañan en todas sus conferencias y clases magistrales. Un personaje mediático y de relevancia mundial. Asiste al festival STARMUS, aquí, en Tenerife, una experiencia astronómica y artística a base de conferencias, visitas al Observatorio astronómico de Izaña en Tenerife y del Roque de los Muchachos en La Palma. Un grupo de astronautas, astrónomos y científicos (incluido Hawking) se sentará en el interior de la cúpula del GTC (Gran Telescopio Canarias), en el Observatorio del Roque de los Muchachos, para presentar, analizar y discutir los últimos avances en sus respectivos campos. Hawking  está acompañado por el premio Novel, John C. Mather y Brian May, ex Queen, entre otros. Los humanos somos los señores de la energía, ha dicho en su conferencia, asegurando que defiende las leyes de la Física frente al concepto de un dios “que juega a los dados”.

Un evento de esta relevancia solo es posible en situaciones y enclaves muy determinados. La astrofísica en Canarias comenzó en Izaña a comienzos de la década de los sesenta, pertenece al Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) con sede en La Laguna, que junto al Observatorio del Roque de Los Muchachos en la isla de La Palma forman un tándem de primer nivel mundial en el Hemisferio Norte. La extraordinaria nitidez del cielo astronómico de Canarias, protegido por Ley, lo convierten en una “reserva astronómica” abierta a la comunidad científica internacional. Disponemos de uno de los complejos de telescopios más importantes del mundo: el GRANTECAN es un referente mundial con un espejo segmentado de 10,4 metros de diámetro. Podríamos ampliar el contexto, por ejemplo las islas de La Palma, Lanzarote, La Gomera y El Hierro declaradas  Reserva Mundial de la Biosfera por la UNESCO. En estos días El Hierro también ha sido declarado Geoparque. Amplias zonas del interior de Las Palmas son Reservas de la Biosfera y el Parque Nacional del Teide en Tenerife. A todo esto le añadimos una laurisilva endémica en las Islas Occidentales, característica de eras geológicas del cuaternario, una biodiversidad marina propia de las zonas de migración de cetáceos- concretamente, entre La gomera y el Sur de Tenerife viven las ballenas calderón-. Anualmente se celebran concursos de buceo fotográfico. Gente del buceo, como El Centolo Negro en Fuerteventura, nos muestra el paisaje marino piel en roca.

Parece claro, aunque podríamos seguir abundando, que Canarias es un entorno único en sus aspectos paisajísticos y bioclimáticos. No nos visitan sin más, porque sí,  no es aleatorio. Es un orgullo para los canarios y para nuestros amigos que nos visitan. Hubo un tiempo en que por las aguas cristalinas de la isla de El  Hierro, habitaba  un mero, uno en particular, que acabó formando parte del paisaje submarino por los buceadores que visitaban las aguas y en Certámenes mundiales de fotografía submarina. Convivían con el amigo Pancho y  se convirtió paulatinamente en símbolo del sostenimiento de los ecosistemas de las islas, un símbolo. A veces, me pregunto, a todo esto,  ¿qué diría el amigo mero Pancho?

6-10-2014

Publicado en El Digital de Tenerife Sur 
Moncho Rouco@ondanuevaradio.com
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